por René Avilés Fabila
Sin duda sería el país más rico del mundo, más equilibrado e
igualitario, su potencial es infinito. Muchos han definido nación como
una comunidad de hombres, estable, históricamente formada, basada en
criterios claros: vínculo de idioma, territorio, vida económica y
sicología manifestada en una cultura compartida por sus habitantes.
Todos estos rasgos están relacionados entre sí y su conjunción permite
que a una comunidad se le pueda llamar así, nación. En estas
característica generales encajan Irlanda, Escocia, el País Vasco y
desde luego Cataluña, quien al igual que todos ellos, ha mostrado sus
deseos de gobernarse con recursos propios y medios atendiendo a sus
particularidades. Si el País Vasco ha dado una fiera lucha por su
independencia, los catalanes no lo han hecho mal. Cataluña tiene, por
añadidura, su propio himno, fiesta nacional, bandera, hermoso idioma y
una luminosa historia que brilló durante los días difíciles de la
Guerra Civil desatada por Franco. Barcelona fue de los últimos
bastiones republicanos, lugar por donde salieron entristecidas las
heroicas Brigadas Internacionales que pelearon hasta el final contra
el fascismo.
Cataluña fue mi primer contacto en España. A ella llegué en 1969,
cuando todavía vivía Franco y su presencia era temida; España padecía
una forzada y violenta unidad y nadie objetaba las órdenes dadas desde
El Pardo. Barcelona me pareció una hermosa ciudad, muy europea y,
simultáneamente, peculiar: era la capital de un país orgulloso de su
historia y cultura, de su fuerte personalidad. Recuerdo que en las
Ramblas, en una librería, un pequeño me sonrió y le pregunté su
nombre. Al no responder, su madre intervino. Disculpe, el niño no
habla castellano, sólo catalán. Recorriendo sus calles, conversando
con catalanes, siempre muy politizados, me percaté de que era en
efecto otro mundo distante del resto de España.
Luego del derrumbe del bloque soviético, en la URSS comenzaron a
aparecer las nacionalidades que estaban sujetas de modo férreo por el
estalinismo. Lo mismo ocurrió en Europa oriental. Emergieron nuevos
países, y distintas y fraternales relaciones políticas y culturales
que enriquecieron al continente. En España, el País Vasco y Cataluña
han intensificado sus deseos de independencia. El pasado referéndum le
dio más de 50% de partidarios a ella. El gobierno de Rajoy reaccionó
con dureza. No. Para colmo, en Madrid se habla de "castellanizar a los
catalanes" y de problemas económicos si se aleja. Pero 53% de las
empresas asociadas a la patronal de Terrassa respaldan la idea, el
resto no se molesta gran cosa con la posibilidad independentista.
Estamos hablando de un amplio sector laboral que tiene miles de
trabajadores. Es claro que Cataluña es autosustentable económicamente.
Cito al economista británico Edward Hugh: "¿A quién le cabe duda de
que Cataluña sería totalmente viable si fuera independiente?". La
fuente precisó que el inglés es conocido por predecir el estallido de
la crisis española, quien añadió: Cataluña podría ser un nuevo estado
europeo y, aunque —auguró— tal vez no se harían las cosas perfectas,
pero "es mejor que seas tú mismo el que cometas tus errores, a que
otros los realicen por ti". Más aún, economistas altamente
especializados de Europa afirman que de ser independiente, con sus
casi ocho millones de habitantes, sin duda sería el país más rico del
mundo, más equilibrado e igualitario, su potencial es infinito, como
en el futbol.
La lucha de Cataluña por ser independiente y gobernarse es larga y no
carece de razones históricas y culturales. Los catalanes están ya muy
lejos de la monarquía y de políticos conservadores como Rajoy. Tengo
la impresión de que la terquedad catalana terminará por imponerse. De
aceptar Madrid, sería una razón más para admirar a España, ya
conformada por naciones independientes y autosuficientes, acaso lejos
de las crisis de la globalización. Serían formidables aliadas en un
continente desigual y complejo.
En mi caso, parafrasearía a Shakespeare: No es que ame menos a
Castilla, es que amo más a Cataluña.
http://excelsior.com.mx/index.php?m=nota&seccion=opinion&cat=11&id_nota=865440
http://www.reneavilesfabila.com.mx
¿Es posible una Cataluña independiente? #politics #eu #usa #NewEuropeanStates
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on Sunday, October 21, 2012
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